Sin duda alguna el 2020 será un año que recordaremos por el resto de nuestras vidas. Para algunos ha sido un año de perdidas, para otros un año de ganancias. Pero para todos puede ser un año de aprendizaje si estamos dispuestos a aprender las lecciones que dejó para nosotros. Por esa razón hoy te quiero compartir 20 cosas que aprendí en el 2020.
1- Que las cosas pueden cambiar en un segundo.
Las letras A.C. y D.C. tradicionalmente se han utilizado para marcar un antes y un después de Cristo. Pero ahora, también las utilizamos para marcar un antes y un después del Coronavirus. A.C. describe nuestro estilo de vida antes del Coronavirus y D.C. describe nuestro estilo de vida después del Coronavirus. El 2020 nos enseño que las cosas pueden cambiar de forma radical en muy poco tiempo y sin duda alguna, es un año que marcará un antes y un después en la historia de la humanidad.
2- Que el mundo es mucho más pequeño de lo que creíamos.
Cuando escuchamos que había un nuevo virus en algún lugar de China pensamos: Y a mi qué, eso esta en China, que lo resuelvan los chinos. No nos imaginamos que unos cuantos meses después el virus iba a estar presente prácticamente en todo el mundo. El 2020 nos enseño que el mundo en realidad es mucho más pequeño de lo que creíamos y que algo que suceda en otro continente, tiene el potencial de afectar a todo el planeta.
3- Que somos más frágiles de lo que creíamos.
Es increíble como un simple bichito que ni siquiera podemos ver a simple vista viniera a poner el mundo de cabeza. No fue necesaria una guerra mundial, un asteroide destruye planetas o el cambio climático. No. Un virus nos enseño que cuando la naturaleza se lo propone, tiene el poder de destruir nuestro estilo de vida.
4- Que somos más fuertes de lo que creíamos.
Si bien es cierto que un virus puede poner en jaque nuestras vidas, también es cierto que cuando nos lo proponemos y trabajamos juntos no hay virus que nos pueda vencer. Como seres humanos nuestra inteligencia y nuestra capacidad de adaptación han sido los factores que evolutivamente han garantizado nuestra existencia y en esta ocasión nos dimos cuenta que si nos coordinamos todos para aplicar ciertas medidas, una pandemia se puede contener.
5- Que la unión hace la fuerza.
Antes del 2020 estábamos viviendo momentos turbulentos y de mucha polarización en el mundo. Parecía que no podíamos ponernos de acuerdo en nada. Por todo se protestaba y los diferentes grupos te catalogaban de enemigo si no compartías su ideología o forma de pensar. El 2020 nos enseño que cuando tenemos un enemigo en común la única forma de derrotarlo es si todos nos unimos contra él.
6- Que la mayoría de la gente es buena.
Algunos dirán que los momentos difíciles tienden a sacar lo peor de los seres humanos. Pero la verdad es que también tienden a sacar lo mejor de nosotros. Desde donaciones, recolección de víveres, palabras de aliento, ideas sobre cómo enfrentar la pandemia, etc. El 2020 nos enseño que somos más los buenos.
7- Que todos tenemos algo que aportar.
El ser solidarios es una cualidad que nos distingue como seres humanos. La mayoría de nosotros no podemos ser indiferentes ante el sufrimiento de los demás. Y el 2020 nos enseño que todos tenemos algo que aportar. Algunos aportaron dinero, otros su tiempo y otros sus palabras de aliento y juntos vimos que cuando nos unimos podemos ayudar a eliminar el sufrimiento en el mundo.
8- Que nuestros ídolos deben ser personas que realmente hacen cosas por nosotros no los artistas, deportistas o influencers.
Espero que aprendamos bien esta lección. El 2020 nos enseño que los verdaderos héroes son los médicos, enfermeras, maestros, personal de limpieza, personal de servicios públicos, choferes de transporte, agricultores, etc. Personas que literalmente arriesgaron su vida por nosotros. Estas personas son quienes deben tener nuestra admiración y respeto, no el último influencer de moda en instagram o youtube.
9- Que las cosas realmente valiosas no se compran con dinero.
Nos dimos cuenta este año que nuestra casa, nuestra cuenta de banco, nuestro coche y nuestros bienes no son lo más valioso que poseemos. No. Descubrimos que lo más valioso que tenemos, el dinero no lo puede comprar. Nuestra salud, nuestra familia, nuestros amigos y nuestro trabajo son nuestro tesoro más preciado y no hay cantidad de dinero en el mundo que pueda comprarlo.
10- Que hay personas que son indispensables en nuestra vida.
Los momentos difíciles tienden a mostrarnos las personas a las que realmente les importamos y el 2020 no fue la excepción. Aquellas personas que te enviaron un mensaje, te llamaron o te visitaron aunque solo fuera para verte desde el interior de su coche, son personas extremadamente valiosas que debes atesorar y mantener cerca de ti.
11- Que es importante decir lo que sentimos a las personas que amamos.
Lamentablemente muchas personas perdieron seres queridos en el 2020. Pero hay una gran diferencia entre perder un ser querido teniendo la oportunidad de despedirte diciéndole lo mucho que significó para ti, a perder un ser querido sin tener la oportunidad de despedirte y de decirle lo mucho que lo amas. Este año, nos enseño que no debemos esperarnos para decirle a las personas que amamos, lo mucho que las amamos.
12- Que no debemos esperarnos a enfermar para cuidar nuestra salud.
Los pacientes con COVID-19 que más han sufrido la enfermedad son personas que generalmente ya traían consigo problemas de salud previos como hipertensión, diabetes, etc. El 2020 nos enseño que no debemos esperarnos a enfermar para cuidar nuestra salud. Si aún no lo habías hecho, la medicina preventiva debe ser algo que debes incorporar a tu vida a partir de este 2021.
13- Que es momento de ocuparnos más del interior que del exterior.
Es increíble la cantidad de tiempo y dinero que le dedicábamos a vernos bien por fuera. Entrenadores personales, estilistas y cirujanos plásticos se hicieron millonarios a costa de nuestro ego. El 2020 nos mostró como personas físicamente hermosas se quebraron ante el aislamiento porque no sabían cómo manejarlo, sufrieron ansiedad, estrés y cayeron en depresión . Este año nos ha enseñado que el estar bien en nuestro interior, es la clave para una vida más plena y feliz.
14- Que los planes deben ser flexibles.
Nuestros abuelos y padres llevaban años diciéndonoslo pero no lo queríamos entender. En sus palabras siempre nos dijeron “Uno propone y Dios dispone”. Al inicio del 2020 muchos de nosotros teníamos planes preparados para ese año, sin embargo nuestros planes fueron destrozados sin miramientos. Solo aquellos que tuvieron la capacidad de ser flexibles y adaptarlos a la nueva realidad pudieron sobrellevar bien este año.
15- Que somos más creativos de lo que creíamos.
Hay un dicho que dice que la necesidad hace al hombre. Y sin duda alguna el 2020 nos enseño que cuando nos enfrentamos a nuevas necesidades, ponemos a trabajar nuestro lado creativo y salimos con nuevas soluciones. Este año inventamos caretas, cubre bocas, túneles sanitizantes, etc. que si bien es cierto no terminaron con la pandemia, si nos han ayudado a sobrellevarla de cierta forma.
16- Que lo único que podemos controlar es nuestra actitud.
Muchas cosas se salieron de control especialmente durante los primeros meses del 2020. La pandemia, la economía y el abasto de medicamentos y alimentos fueron solo algunas de ellas. Cómo sociedad estábamos atados de manos ante lo que podíamos hacer al respecto, pero algo que siempre tuvimos la posibilidad de controlar, fue nuestra actitud ante todo lo que estaba pasando. El mantener una actitud positiva a pesar del caos que estaba sucediendo a nuestro alrededor fue una de las claves para poder sobrellevar de mejor manera el 2020.
17- Que es mejor estar solo que mal acompañado.
El aislamiento social nos dio la oportunidad de reencontrarnos a nosotros mismos y de conocernos un poco mejor. También nos permitió saber que la soledad no es tan mala si la utilizamos para aprender, crecer y volver a nuestro centro. Pudimos darnos cuenta que en ocasiones es mejor estar solo, que mal acompañado.
18- Que nuestros gobernantes no tienen todas las respuestas.
Antes del 2020 aún había personas que confiaban ciegamente en sus gobernantes. Los veían como salvadores capaces de resolver cualquier problema que se presentara. Este año nos enseño que la mayoría de ellos no tienen ni idea de qué hacer ante una situación como ésta. Y que en el mejor de los casos en quien podemos confiar es en la capacidad que como sociedad tenemos para organizarnos para lidiar con lo que se presente.
19- Que la fe es poderosa.
La mayoría de las personas creemos ser personas de fe, pero la realidad es que solo experimentamos el verdadero poder de la fe cuando somos puestos a prueba. El 2020 sin duda alguna fue un año que nos puso a prueba pero la fe en que las cosas iban a mejorar nos ayudo a superarlo.
20- Que no importa que tan grande sea la tormenta, al final, siempre saldrá el sol.
Así como el 2020 se fue, el COVID-19 también lo hará. No deseo que las cosas vuelvan a ser como antes, porque la verdad como especie no lo estábamos haciendo muy bien. Quizá por esa razón todo esto sucedió. Lo que si deseo es que una vez que termine todo esto, podamos aprender las lecciones que nos deje y que de ese aprendizaje nos transformemos en seres humanos más conscientes, en sintonía con la naturaleza y más agradecidos de lo que este maravilloso planeta nos da.
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Jashiel García es Conferencista y Autor de los Libros “Actitud de Triunfador” y MotivACCIÓN. Con Maestría en Administración y Liderazgo. Se especializa en Actitud Positiva, Liderazgo y Equipos Altamente Motivados. Su filosofía personal y profesional se basa en 3 pilares: 1.- Todos tenemos un Gran Potencial, 2. El Activo más valioso de cualquier Organización es su Gente y 3. Cualquier habilidad puede ser aprendida si tienes la Actitud correcta.
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